sábado, agosto 12, 2006

Todo bajo el cielo tiene su tiempo.

Un tiempo para nacer.
Un tiempo para morir.
Un tiempo para matar.
Un tiempo para soñar.
Un tiempo para olvidar.
Un tiempo para recordar.
Un tiempo para respirar.
Un tiempo para ahogarse.
Un tiempo para viajar.
Un tiempo para viajarse.
Un tiempo para deslizarse.
Un tiempo para vivir en la violencia.
Un tiempo para volar.
Un tiempo para llorar.
Un tiempo para subir a un árbol.
Un tiempo para caer.
Un tiempo para navegar dentro de uno mismo.
Un tiempo para concebir.
Un tiempo para ser concebido.
Un tiempo para ser otra persona.
Un tiempo para el silencio.
Un tiempo para convertirse en un Do menor.
Un tiempo para negar.
Un tiempo para desaparecer.
Un tiempo para tirarse un pedo.
Un tiempo para que el destino se porte como todo un ojete.
Un tiempo para negarlo todo.
Un tiempo para tomar agua de horchata.
Un tiempo para visitar a los enfermos.
Un tiempo para enfermar.
Un tiempo para agonizar.
Un tiempo para abrazar a Dios.
Un tiempo para volver a ser virgen.
Un tiempo para ver todo el “layers”(capas).
Un tiempo para descansar en nada y medirnos en lágrimas.
Un tiempo para humedecernos.
Un tiempo para tocar un timbre y salir corriendo.
Un tiempo para orinarse en los pantalones frente a una multitud.
Un tiempo para contestarle “What?” a un francés.
Un tiempo para creer que te estás ligando a la camarera.
Un tiempo para lamerse los labios frente a una mujer hermosa que nunca habías visto antes.
Un tiempo para darle un abrazo a alguien que te odia.
Un tiempo para saludar alegremente al novio de la mujer que siempre te ha amado.
Un tiempo para quitarse los zapatos.
Un tiempo para dejar de mirar.
Un tiempo para recostarse en una plaza pública.
Un tiempo para caminar hacia atrás en un puente.
Un tiempo (poco pero lo hay)para portarse como la gente decente.
Un tiempo para hacer que un niño se cuestione sobre la teoría del caos.
Un tiempo para golpear a un sacerdote.
Un tiempo para ser secuestrado por un ovni.
Un tiempo para pensar en el tiempo.
Un tiempo para hacerle cosquillas a tu abuelo.
Un tiempo para disfrutar del dolor.
Un tiempo para esperar a la primavera.
Un tiempo para prender 3,4 o 5 velas.
Un tiempo para creer que hemos inventado algo.
Un tiempo para planear un viaje.
Un tiempo para extrañar.
Un tiempo para crear tu propio lenguaje.
Un tiempo para escribir con la mano izquierda.
Un tiempo para equivocarte de hemisferio.
Un tiempo para intentar.
Un tiempo para decir con actitud soberbia: “Soy una mierda”.
Un tiempo para romperte un hueso.
Un tiempo para planear todo lo que nunca vas a hacer.
Un tiempo para arrepentirse.
Un tiempo para hacer “donitas” de humo.
Un tiempo para ser de humo.
Un tiempo para intentar cocinar galletas.
Un tiempo para aparentar ser baterista.
Un tiempo para tener en mente el negocio más prospero de tu vida.
Un tiempo para sentir que Dios te odia.
Un tiempo para comprar un boleto de camión eligiendo el destino al azar.
Un tiempo para creer que no necesitas una licenciatura una semana antes de graduarte.
Un tiempo para pensar en vanalidades.
Un tiempo para no contestar el teléfono.
Un tiempo para hacer música con los ojos.
Un tiempo para no tener nombre.
Un tiempo para subir frenando con motor.
Un tiempo para dejar de existir un momento.
Un tiempo para reestructurarlo todo desde el principio.
Un tiempo para pensar en la violencia.
Un tiempo para perder el control.
Un tiempo para caer en pedazos.
Un tiempo para recorrer besando el cuerpo de la mujer que se ama.
Un tiempo para abandonar.

No hay comentarios.: